Beneficios de la carpintería metálica
Contenidos de este artículo:
En un universo de posibilidades donde el acero se convierte en lienzo y las manos en verdaderas herramientas de magia, la carpintería metálica se establece como el arte supremo de moldear el metal a nuestro gusto.
La carpintería metálica trasciende al simple concepto de utilidad, convirtiéndose en un auténtico arte funcional. Sus obras, además de su innegable belleza estética, cumplen propósitos prácticos y sirven como testimonio de la maestría del artesano.
Desde impresionantes estructuras arquitectónicas hasta muebles de diseño único, la carpintería metálica se adentra en la esencia misma de la creatividad y la innovación.
¿Qué es la carpintería metálica?
Cuando hablamos de carpintería metálica nos referimos a todos aquellos productos metálicos elaborados mediante procesos precisos y específicos con la ayuda de maquinaria y equipos propios del corte, plegado, ensamblaje por soldadura y posterior procesamiento mecánico.
Es una tecnología que ha alcanzado tal nivel de desarrollo que también puede ser utilizada en la creación de algunas obras de arte monumentales capaces de sobrevivir a los elementos y al tiempo, un ejemplo para todos es la Torre Eiffel.
El uso principal de la carpintería metálica
La carpintería metálica pertenece a los más diversos sectores industriales desde la industria siderúrgica hasta la industria petrolera, sectores químico, mecánico y energético. Casi todas las industrias, de hecho, requieren elementos como láminas de metal y metal cortado.
Los trabajos de carpintería metálica han dado a la arquitectura la posibilidad de construcciones mayores, mejores y más seguras edificaciones.
El hierro y sus aleaciones se utilizan como vigas de apoyo en la carpintería metálica debido a que permiten aprovechar sus propiedades resistentes, reemplazando materiales más frágiles como la piedra, la cal o la madera. Es por ello que la carpintería metálica se ha vuelto cada vez más imprescindible para la edificación y las estructuras metálicas en general.
¿Para qué sirve la carpintería metálica?
La carpintería metálica se utiliza para crear construcciones de edificación y estructuras metálicas.
Por estructuras metálicas en general, en el campo de la carpintería metálica, no nos referimos únicamente a naves industriales o naves. Estos productos también incluyen todos los trabajos en metal que requieran estabilidad, resistencia, seguridad y precisión.
Las escaleras de incendios, por ejemplo, son perfectas para aclarar el concepto de estructuras metálicas realizadas con carpintería metálica. Pero estructuras como:
- Ventanas
- Barandillas
- Vallas
- Puentes.
Tipos de carpintería metálica
Existen varios tipos de carpintería metálica, cada uno con sus propias características y aplicaciones específicas.
Algunos de los tipos más comunes son:
- Carpintería metálica pesada fabrica estructuras portantes y de grandes dimensiones. Se utiliza principalmente en los sectores industrial y civil, pero también en el sector urbano y en la arquitectura.
- Carpintería ligera es normalmente con chapa.
- Carpintería metálica estructural: Utilizada en la construcción de edificios y estructuras, como puentes y torres. Los materiales comúnmente utilizados son acero estructural, como el acero al carbono y el acero inoxidable.
- Carpintería metálica ornamental: Se enfoca en la fabricación de elementos decorativos y detallados, como rejas, barandillas, puertas y ventanas. Los materiales utilizados varían y pueden incluir acero, hierro forjado, aluminio y metales no ferrosos.
- Carpintería metálica de cerramientos: Se refiere a la fabricación de elementos para cerramientos y fachadas, como paneles de revestimiento, persianas metálicas y sistemas de protección solar. Los materiales comunes son el aluminio, el acero galvanizado y el acero inoxidable.
- Carpintería metálica industrial: Se utiliza en la fabricación de estructuras metálicas para fines industriales, como almacenes, naves industriales y estructuras de soporte. Los materiales principales son el acero estructural y el acero laminado.
Es importante tener en cuenta que la elección del material en la carpintería metálica puede variar según las necesidades específicas de cada proyecto, considerando factores como resistencia, durabilidad, estética y presupuesto.
Ventajas de la carpintería metálica
Entre todos los beneficios de la metalurgia, el principal es la rapidez de construcción.
De hecho, los elementos de la estructura son diseñados por un arquitecto o ingeniero. Estos elementos suelen estar prefabricados en una empresa, transportados a la obra y ensamblados utilizando pernos y soldaduras de forma rápida y precisa. Esta metodología de construcción elimina los tiempos de endurecimiento asociados con los materiales de cemento clásicos, lo que permite acelerar el proceso de construcción y reducir los plazos de entrega.
Además, ofrece la ventaja de una mayor precisión y control en la fabricación de los elementos estructurales.
Otra gran ventaja de la carpintería metálica es la relación entre peso y resistencia del acero, lo que permite construir edificios de tamaño considerable, pero a la vez muy livianos en comparación con los realizados con métodos convencionales de albañilería.
Además, el acero tiene una gran elasticidad y resistencia a los esfuerzos, característica que limita mucho las roturas por vibraciones y golpes.
Es por eso que la metalistería se está abriendo camino en las prácticas de fabricación de productos más comunes.